Un lugar que ya es de todos

En el acceso sur de nuestra ciudad, un espacio que parecía solo un triángulo vacío se transformó en el punto de llegada para cientos de esquineses que caminan, corren o pedalean cada día.

Hoy, ese lugar reúne a familias, deportistas y vecinos que disfrutan de juegos, barras, sectores de gimnasia, un santuario y hasta una mesa para compartir unos mates.

Es un espacio que nació de la comunidad y creció con ella. Por eso, cuidarlo es tarea de todos: mantenerlo limpio, respetar las instalaciones y seguir haciéndolo un lugar de encuentro para cada vecino.

Cuidemos nuestros espacios, porque son reflejo de lo que somos como comunidad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *